Una epístola publicada por Albert Einstein en 1.918 relataba un hipotético diálogo entre un físico detractor de la teoría de la relatividad y el propio Einstein (podéis ver la traducción, lo siento, no recuerdo el nombre del traductor).
Es fascinante ver como hasta los más sabios se obcecan en sus propias obsesiones y como ello les lleva a manipular el pensamiento para que siempre favorezca sus puntos de vista.
Cuando, en el "diálogo" se desarrolla la explicación relativista sobre el esquema del tránsito de los objetos A y B en sendos sistemas de referencia K y K´-en la tabla comparativa-, llegados al punto 2, no se hace ninguna alusión a la posible duración del estado no acelerado.
Quiero decir, si los estados no acelerados se prolongan lo suficiente, desbordarán con mucho y llegarán a anular los efectos de los estados acelerados.
Por tanto, la explicación del relativista no explica nada en absoluto.
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Rafael Claver
viernes, 7 de marzo de 2008
Diálogo de Einstein
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